lunes, 12 de marzo de 2012

Ya pasaron dos semanas y estoy feliz. Todo empezó porque el miércoles Sergio me dijo que su amiga está embarazada, pero que   no era de él. Yo me quede muy asombrada. Cómo su amiga no podía saber con quién se acostaba. No era normal. No  quise preguntar más del  tema.

Ese día decidimos faltar al trabajo. Teníamos  que celebrar. Pensamos  ir al Salón Indio a tomar una micheladas. Pero  ahí podríamos ir cualquier otro día. Eso era algo especial. No  sabíamos que ese día  podría terminar una bonita amistad y  que jamás nos arrepentiríamos. Fuimos al KSHAN,  comimos y  tomamos  una copa de vino tinto. Sergio compro dos galletas de la suerte. Mi  galleta decía: tú  vida tendrá un cambio, jamás lo olvidaras. Él no quiso decirme que era lo que decía su galleta. Después decidimos   ir a patinar. Eran las 18:30 horas  cuando salimos de la pista de hielo. Había empezado a llover. Su casa era la k quedaba más cerca. Nos dirigimos asía allá.

Cuando llegamos: se había ido la luz, sus papas no estaban, nuestra  ropa estaba toda mojada. Me puse mi ropa del trabajo,  para  que se pudiera secar mi otra ropa. Él  me preparo un café. Ya pasaban de las 21 horas. No  paraba de llover,  tenía  mucho frio y la luz no llegaba. Habíamos  tomado demasiado café. Me  dio  una frazada y nos abrazamos para que se nos quitara el frio. Nuestros pies estaban  muy helados, mi nariz estaba muy roja y él se burlaba. Cuando  menos lo pensamos comenzamos a  besarnos, fue  el beso más largo y frio. Después de cinco minutos no pudimos contenernos  y  tuvimos relaciones. Lo único malo es que había sido en su casa y jamás podría volver a ver a sus papás  a la cara. Eran las 10:30horas tenía que irme  a mi casa y por suerte llego la luz y sus padres también.

por nada. Él me repetía que le gustaba estar conmigo y  que me quería demasiado. Yo  me   había dado cuenta de que él era una  persona muy divertida y que me gustaba estar con él.

Llegamos a mi casa nos despedimos con un largo que pareciera como si fuera el ultimo. Baje del carro y  entre  a mi casa. Solo  pasaron 30 minutos, le mande un mensaje en el cual  por primera vez le diría te quiero.        

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